SATURNO EN ACUARIO Y EL DESAFÍO DE VIVIR EN sociedaD

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Hoy, debido a la pandemia del Corona Virus, gran parte de la Humanidad se encuentra en cuarentena, con aislamiento social (parcial o absoluto) debido al (Covid-19), Mientras que otro tanto, que vive menos aislado, debe mantenerse a más de un metro de distancia, con el rostro tapado.

Por lo mismo, resulta extraño escribir del arquetipo Saturno -en Acuario-, como la representación de la consciencia de grupo o la consciencia de la propia libertad dentro de un grupo; cuando justamente estando en nuestras casas estamos llamados a la distancia social.
 
Pero para quien entienda la psicología de las polaridades, esto justamente no tiene nada de extraño. El aislamiento o el confinamiento pueden generar mayor conciencia social o gregaria. Algo así como lo que nos muestra Daniel Defoe en su novela Robinson Crusoe.
 
Mientras leemos su texto -más allá de la admiración al ingenio de Robinson Crusoe- queremos, en algún punto de la lectura, que el protagonista encuentre a otros seres humanos, que éstos sean nobles y no que se quede varado por siempre en la isla.
 
En el aislamiento, instintivamente reconocemos la fuerza de la interdependencia y cuán indispensable y agradable puede resultar ser parte de la experiencia colectiva, especialmente cuando estamos en necesidad -como hoy con el Corona Virus- o simplemente cuando compartimos con otros los mismos códigos y valores.
 
Toda gran tarea o dilema puede ser tanto más fácil de resolver cuando muchos solidarizan o aportan a una causa. Las conductas gregarias son un recurso adaptativo y evolutivo de nuestra especie y una buena parte de los seres humanos hoy en reclusión o con temor a enfermarse, está debiendo recordar ese logro ancestral, aun cuando cooperar implique aislarse.
 
Con esto no estoy romantizando el colectivo por sobre las necesidades individuales. Porque también es un logro evolutivo haber alcanzado un sentido de individualidad y la capacidad de razonar por nosotros mismos.
 
En un artículo anterior sobre Saturno en Capricornio, destaqué la importancia de lograr asumir, como individuo, la responsabilidad por la propia vida y las propias decisiones.
Si logramos hacernos responsables de nosotros mismos, naturalmente nos sentimos más libres y ejercemos nuestro libre albedrío. Sin embargo, al ejercerlo, aparece nuevamente el límite real y palpable de los otros, y ¿qué hay con los demás por qué debo considerarlos? ése es el reino de Acuario.
 
Acuario es un signo que alude a nuestra convivencia colectiva, de valores compartidos; y hace referencia a utopías sociales, pero también a logros evolutivos como especie, que representan el impulso que nos lleva a progresar y superar nuestros límites puramente instintivos. Las grandes civilizaciones surgen gracias a este salto luminoso.
 
Tal vez ya hayas leído en redes sociales la siguiente anécdota: alguna vez una estudiante le preguntó a la antropóloga Margaret Mead, ¿cuál podía ser el primer signo de civilización en una cultura antigua? Mead respondió que el primer signo de civilización se encuentra en un fémur roto que luego sanó.
 
No nombró ningún monumento o diseño instrumental o arte. En su respuesta, Mead apuntó a que en algún lugar de la historia alguien se detuvo -junto al enfermo-, y se dedicó a ese individuo en particular hasta verlo sanar. Contrario a lo que instintivamente debe hacer la especie animal para poder sobrevivir como especie, que es abandonar al débil o al enfermo.
 
Ocuparé la respuesta de Mead para amplificar lo que puede significar Saturno en Acuario.
 
Uno de los dilemas de Acuario es cómo aprender a articularnos dentro de un todo, sin perder nuestra individualidad. El logro de la propia independencia, originalidad o identidad personal valen tanto como la de un otro. En palabras nuevamente de Margaret Mead:
 
"Siempre recuerda que eres absolutamente único, igual que todo el resto"
 
Saturno sienta las bases y la estructura social y los límites dentro de esa estructura. Cuando está en Acuario, coincide con algo de aislamiento o impedimentos en la vida social; también con dilemas colectivos como el que Mead mencionó, en términos de lo que es dar señas de civilización.
 
En Acuario se trata de que podamos elegir libremente nuestro compromiso y participación en la vida social.
 
La madurez que representa Saturno en Acuario está en la capacidad del individuo de elegir y no en la de sentirse obligado o empujado a participar.
 
La tarea de verdaderamente optar de manera libre y a la vez considerar a los demás, es compleja y requiere alcanzar un alto desarrollo emocional y moral, lo que toma bastante tiempo (algo propio de Saturno)
 
El psicólogo e investigador Lawrence Kohlberg llamó a la fase más elevada del desarrollo moral humano: fase Post-Convencional. En esta fase, somos capaces de regular nuestro comportamiento social más allá de la autoridad, la norma (o la regla) o la coerción social.
 
En la fase Post-Convencional entendemos lo que es correcto porque somos capaces de mirar en forma panorámica la situación, trascendiendo nuestros intereses particulares y empatizando con los demás, aun cuando esto signifique desafiar la norma o la visión de nuestra cultura o costumbres.
 
Para que se entienda mejor la diferencia entre lo que es una moralidad normativa y la que es post convencional, pongo algunos ejemplos:
 
En algunos países árabes es costumbre -y por lo tanto legal (normativo)- que un hombre adulto se case con una niña de 9 años y tenga sexo con ella, aun cuando la niña pueda morir en el acto. Las reglas y las normas lo hacen admisible... ¿pero, es ético?
 
No tan lejos el dilema del agua: en Chile es perfectamente legal que el agua esté en manos de unos pocos privados, pero en la peor sequía de nuestro país dejar a comunidades sin el suministro necesario ¿es ético?
 
Otros “no contagiados” con el Covid-19 realizan un matrimonio respetando la norma del toque de queda y lo sienten seguro porque nadie está enfermo ¿es ético?
 
Sin embargo, otros sin estar infectados y sin que la norma lo diga, han decidido cuidar a los demás no circulando fuera de casa. Lo deciden así, conozcan directamente o no a quienes protegen. Esto claramente se acerca a la moral post-convencional.
 
Son ejemplos de respuestas muy distintas, tan variadas como es cada ser humano dentro de un todo (la sociedad) y tan distintas de acuerdo al logro que significa una ética más sofisticada.
 
Saturno en Acuario representa ese primer paso, y esa gran tarea hacia la civilización. Eso no ocurre por coerción, sólo se puede dar por individuos que actúan en libertad, favoreciendo el desarrollo de una consciencia social. Es un gran paso evolutivo que todo individuo puede potencialmente dar y que puede repercutir para que otros puedan darlo, pero que debe decidirse en forma libre y personal para que la sociedad verdaderamente cambie.
 
Podemos normar, es cierto; podemos restringir obligatoriamente por un bien superior, entendiendo que no todos aún han alcanzado ese signo admirable de humanidad y empatía social. Pero eso no implica que pasada la pandemia la sociedad vaya a cambiar: eso es un proceso que pasa por el individuo.
 
Ahora sabemos que cuando una masa crítica de individuos verdaderamente cambia y voluntariamente colabora, entonces ese efecto puede crear un efecto dominó y una nueva conciencia social.
 
Saturno en Acuario nos invita -en este primer ingreso hasta julio- a hacernos conscientes de una manera muy gráfica y concreta- como lo es con el Corona Virus- lo que significa ser interdependientes. Y la diferencia entre vivir para sí mismo o considerar a los demás en mi existir.
 
Mucha gente está asustada, estresada o no sabe que hacer con su tiempo, pero esta reclusión voluntaria u obligada nos ayuda a repensarnos. Hay quienes temen por su subsistencia. Los gobiernos hablan de disminución en la actividad económica. Pero quizás ese es una manera añeja de pensar. La actividad podrá disminuir pero en una nueva mentalidad más cooperativa quizás no signifique el desastre que imagina el viejo patrón de hacer las cosas. Quizás con Saturno en Acuario tengamos asomo de una nueva Era.
 
¿Cambiaremos? ¿Consideraremos más a los otros? ¿o seguiremos siendo seres individualistas y materialistas? Mientras estemos en cuarentena nos hará bien reflexionar qué tipo de individuo y sociedad queremos en adelante y que pasos se deben dar para dar muestras de civilización donde cada uno cuenta.
 

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