© Alice Thomas, enero 2015 La ex ministra Helia Molina el día 30 de diciembre 2014 dio una entrevista al diario La Segunda, a propósito de la Ley del Aborto, que entrará prontamente en fase de tramitación. La entrevista al parecer fue muy larga -según dice Helia Molina- y muy al final de ésta, Catalina de Améstica -la periodista-, le consulta: “Grupos conservadores priorizan el derecho a la vida del que está por nacer por sobre el derecho de elegir de la mujer. ¿Qué prima?” Ante lo que Helia Molina responde: - “Esto es bien doble estándar, porque en todas las clínicas cuicas de este país muchas de las familias más conservadoras han hecho abortar a sus hijas. Las personas con más dinero no requieren de leyes, porque tienen los recursos.” Helia Molina, en un acto muy espontáneo y sin tanto preámbulo, también bien corajudo (como es propio de una Aries), lo declaró así como una verdad que puede ser dicha a viva voz. Si bien creo que algo así dicho por una ministra, sin los datos precisos o pruebas que correspondan a su cargo es complicado, también creo que nadie puede impugnarle que no sea cierta su declaración, pues al fin al cabo es una realidad que todos conocemos, o que al menos tenemos algún tipo de referencia. Que los conservadores de siempre se hayan escandalizado no es lo nuevo, lo nuevo está en qué sus dichos movilizaron la defensa en pro de la ex ministra de una buena parte de los ciudadanos. Ni siquiera el Gobierno fue capaz de dar tal respaldo, expresando que sus dichos eran a título personal y no representaban a éste último. Con más fuerza que en otras ocasiones. Según mi marido (un twittero asiduo), twitter estaba que ardía. Incluso algunas conocidas como Javiera Parada y otras desconocidas, reconocieron haberse hecho un aborto, todo en apoyo a los dichos de Helia Molina. ¿Qué ocurría en el cielo ese día? ¿Qué movilizó tanto a la cuidadanía no conservadora? El cielo estaba ardiendo un poco antes que twitter lo hiciera, dos semanas antes Urano y Plutón habían hecho su sexta cuadratura exacta. [Ambos planetas nos ponen en acción frente a los temas que requieren cambio]. Una semana antes además, Urano, había entrado a su fase directa, haciendo más intensa su influencia. El mismo día Urano (directo), se encontraba en el grado 12 de Aries, el mismo grado del Sol de Helia Molina (12° de Aries). Urano en Aries -como arquetipo- representa la conciencia respecto a las libertades individuales (y es lo que ha venido movilizándose y haciéndose consciente desde abril del 2011). En este caso, Urano gatilló el tema de la libertad individual a través del tema del derecho reproductivo y se expresó a través de Helia Molina, que tenía el Sol en Aries, justamente por donde pasaba Urano, siendo un arquetipo totalmente afín a este tránsito. Fue el contacto de Urano con su sol, lo que permitió su expresión tan visceral y el factor sorpresa (propio de Urano) que hizo que todo se desencadenara muy rápido: su publicación, la controversia, su rápida renuncia y salida etc. Y mientras ese día mi marido me leía los mensajes de twitter, lo que yo lograba captar de ellos, era la indignación de la gente, especialmente al doble estándar de nuestra sociedad, que está dispuesta a crucificar a una Helia Molina, pero no a reconocer la cruda verdad. No ocupo aquí azarosamente la palabra crucificar, pues el Sol en Aries de Helia Molina, tiene una oposición (natal) con el planeta Neptuno (en 9° de Libra). Y Neptuno, entre otras cosas, es un arquetipo de sacrificio, de ceder, de desilusión también. De tal modo que la ex ministra en lo personal, contactó ese día de manera sorpresiva un tema que ella conoce bien. Y seguramente no es la primera vez que ella vive el tener que hacerse a un lado, o también, el tener que vivir la desilusión por falta de apoyo. Ella sabe de seguro sacrificarse por un bien mayor (Sol op Neptuno), por algo es médico también. Su Sol en Aries también está en trino con Plutón en Leo, permitiéndole ponerse al servicio de los logros más trascendentes y no entorpecer la agenda del gobierno, ni a la ley de aborto terapéutico. No hay que olvidar también que este hecho ocurrió cuando Saturno ya había entrado al signo de Sagitario, configuración arquetípica que nos exige integridad valórica. Saturno, estaba muy cerca del propio Júpiter de Helia Molina a tan sólo 3 grados. Y tal como mencioné anteriormente en la serie de Júpiter, Júpiter representa nuestra mirada valórica. Su Júpiter natal en Escorpio, como se puede apreciar más abajo en su carta (parcial), está íntimamente conectado a la experiencia femenina, con su cuadratura con Venus en Piscis y tal vez dependiendo de su hora de nacimiento con la Luna en Virgo. Helia valora más lo que experimenta la mujer que las ideologías que se desconectan de la experiencia. Y así fue que de una manera -centrada en la experiencia- y pensando justamente en por lo que pasan las mujeres y el dolor innecesario, es que dijo lo que dijo y expresó horas más tarde, no arrepentirse. Esta Ariana, todavía nos tiene discutiendo el tema. Pero tal como lo dijo ella misma ese día: qué lástima que sus dichos terminaran siendo más importantes que la misma ley de aborto terapéutico.
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© Alice Thomas, 29 julio 2014 El día del niño internacionalmente fue fijado para una fecha que cae en el signo de Leo, signo regido por el Sol. Este astro simbólica y sincrónicamente representa –entre varias cosas- a los niños, pero por sobre todo al niño divino, esa chispa individual y particular que nos caracteriza y que nos promete alcanzar la prometida felicidad. Leo y su regente simbolizan también a los niños que aún somos de adultos, cada vez que nos acordamos de jugar y de entretenernos en un “pasa-tiempo” cada vez que decimos ¡el tiempo se nos pasó “volando”! al ritmo y en el disfrute propios de nuestro hobby o juego. El mercado en este día atrae a sus consumidores a través de los más pequeños, haciéndolos sentir especiales y poderosos, merecedores de un juguete o de simple entretención: están en su derecho para reinar al menos durante ese día. La publicidad, que en astrología también está regida por Leo, conoce el poder que tienen los niños sobre sus padres. En lo que se llama "kidfluence" (niño-influencia); se ha llegado a medir cuánto resisten los padres ante la insistencia de sus hijos al pedir se le compre tal o cual producto. La verdad es que es muy poco -cada vez menos diría yo-. La estrategia "marketera" toma en cuenta dos variables: una, la capacidad de persistencia de un niño para solicitar la compra de un producto y, en segundo lugar, el poder de la publicidad para apelar a los sentimientos de culpa de sus padres, para hacerles sentir que están haciendo felices a sus hijos si compran o consumen tal o cual producto. Se bombardea a los pequeñitos con estrategias de mercado muy atractivas y con ofertas llenas de luces que mantendrán su interés cuando mucho una semana, y puede que en ese 'seguir la corriente' sin darnos cuenta se va desvirtuando el sentido del juego, que en esencia es pura creatividad. Casi todo niño está equipado para crear un mundo a partir de escasos elementos, “un como si”. “Hagamos como si fuésemos astronautas, o bailarinas, bomberos, pacos o ladrones, reinas, gladiadores, indios, ninjas, piratas, buscadores de tesoros, presidentes” etc… Poco recuerdo de mis juguetes -que no eran demasiados-, pero sí recuerdo las horas colgada en una valla, arriba de una bicicleta, o cómo me encantaba el “mandandirun dirun dan” con esa canción del “Buenos días su señoría…” o correr a esconderse a ‘las escondidas’. Para entretener a un niño, la verdad es que no hace falta mucho, y en eso es muy positivo acordarse lo que era serlo, confiando en los recursos que ellos tienen para pasarlo bien, y también en los nuestros para dejar que lo pasen bien ese día (y los otros que quedan del año, por supuesto). A veces sólo basta una plaza con otros niños o visitar la casa de los primos, o incluso unas piedras o botones o una madeja de lana; en fin, si acudimos a nuestra creatividad Solar y Leonina seguro saldremos con algo entretenido. |
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Alice Thomas
Psicóloga Clínica, Astróloga Categorías
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