—La Gran Conjunción Júpiter Saturno-- O lo que todos los astrólogos comentan tan entusiasmados ¿Llegó la Era de Acuario? © Alice Thomas ♃ ☌ ♄ (18:22 UT 15:22 CL) 2020 fue y será un año que todos recordaremos y que sin duda pasará a la historia ¡Pero también pasará a la historia de la astrología! por la gran cantidad de eventos astronómicos y astrológicos significativos que nos acompañaron en el transcurso de los 365 días y que se sincronizaron con los eventos externos. Muchos astrólogos -entre los que me cuento- quedamos cortos con la interpretación de lo que venía; a pesar de que sabíamos que 2020 era sin duda un año complejo y de transformación. Los eventos más importantes durante 2020 han sido varios ciclos planetarios -de largo plazo- que coincidieron ¡justo en 2020! con su fase de renovación. Marte en cuadratura con la triple conjunción en Capricornio, y las temporadas de eclipses o conjunciones -que han coincidido con los solsticios- han movilizado la espina dorsal del mundo (eje Cáncer/Capricornio) Los ciclos Júpiter/Plutón (ciclo de 13 años) o Saturno/Plutón (ciclo de 38 años), terminaron y comenzaron en el mismo signo del zodíaco, en Capricornio. Y antes de terminar 2020, horas después del solsticio de diciembre, Júpiter y Saturno renovaron también su ciclo (de 20 años), pero en Acuario. ♃☌♄ --21-12-2020 a las 15:22 CL(18:22 UT), en el signo de Acuario, O ° ♒ Los primeros dos ciclos que menciono más arriba son bastante agobiantes: están relacionados a Plutón, un planeta que representa la regeneración de la vida a través del ciclo de la vida y la muerte. Habitualmente, a través de ellos vivimos ciclos de depresiones económicas, fin de instituciones, colapso de formas habituales de ver el mundo (o de organizarlo), y también desastres naturales. Cuando estos ciclos coinciden con este “reseteo”, es posible esperar transformaciones sociales, económicas y geopolíticas a gran escala. Pero, también, transformación y regeneración en nuestras propias vidas. Habiéndose unido en 2020, la triple conjunción Júpiter, Saturno y Plutón en Capricornio, el tema de la regeneración fue masiva y total. No hay más que ver que un pequeño virus nos tiene a todos dentro de una vasija alquímica, en un proceso de purificación y transformación a gran escala. Pero, tal como ha dicho el astrólogo Gonzalo Pérez en variadas entrevistas, nunca en la historia habíamos entrado todos al mismo tiempo a vivir cosa igual. Habitualmente éramos testigos de cómo algunas zonas del planeta se veían más afectadas que otras. Con estos ciclos, cada uno de nosotros ha debido dejar ir un estado conocido, algo o a alguien que formaba parte de su vida. Y dentro de tanta vulnerabilidad, nos ha tocado preguntarnos qué es lo verdaderamente importante y agradecer, puro agradecer. La austeridad, la valoración de lo simple y la resiliencia son también valores ‘capricornianos’ que aparecen la mayor parte de las veces frente a grandes pruebas. Hace poco escuché una mini entrevista que le hacen a Isabel Allende, donde le preguntan cómo quisiera ver el mundo en 10 o 20 años más, y ella ofrece una serie de imágenes, pero finaliza dando la imagen de la tierra como un barco, donde todos deben remar hacia el mismo lado; “Si no” –dice-, “este barco se volteará”. “Exacto”, digo yo al escucharla, porque la amenaza viene no sólo de la pandemia, sino también del calentamiento global. Vivir conscientes de lo efímera que es la vida no es fácil para ninguno de nosotros. Por eso, este ciclo de la conjunción Júpiter/Saturno en Acuario, que resta de la fórmula a Plutón y a Capricornio, se ha convertido en la tabla de salvación. Un lugar donde se busca respirar. Cómo podemos entender la conjunción-- He escuchado y leído muchas interpretaciones; varias de ellas me han encantado, varias luminosas, otras demasiado luminosas, otras oscuras y alarmantes. Como siempre, los arquetipos contienen fuerzas conscientes y luminosas y otras más oscuras y primitivas. Hay que considerar los claro-oscuro propios de todos estos símbolos arquetipales. No pretendo ser la que diga cómo se debe interpretar la Gran Conjunción; pero sí examinaré a continuación algunos conceptos que me parecen importantes de considerar al momento de hacerse una idea de qué esperar de esta conjunción para todos nosotros y para cada uno en lo individual. La Mutación al Aire de ♃ ☌ ♄ Las conjunciones Júpiter Saturno ♃☌♄, llamadas también la Gran Conjunción, ocurren cada 20 años aproximadamente, e inician por lo general un nuevo orden: se habla de cambios de reyes, gobiernos o formas de gobernar. La conjunción incide en nuestros valores, en lo que consideramos importante y valioso y cuáles son las reglas del juego que nos rigen. Pero ocurre que las conjunciones en intervalos de 20 años van coincidiendo en el mismo elemento astrológico, por el lapso de 200 años. Cuando mutan a otro elemento, lo hacen luego de dos siglos: eso es lo que se define como Mutación. La Mutación a otro elemento es, por supuesto, considerado por los astrólogos como un momento muy significativo. La visión y las reglas que ordenan el mundo cambiarán y ahora vendrán otras reglas, otros valores, otras formas de organización, otro marco paradigmático teñido por los valores del nuevo elemento astrológico. A veces, estos ciclos traen cambios geopolíticos, guerras e invasiones dependiendo también de otros tránsitos que los acompañen. Las mutaciones ocurren de un elemento a otro, y siguen el orden siguiente: Fuego, Tierra, Aire y Agua. Este orden y cambio se renueva cada 800 años. Comenzando en 1802, construimos una visión de mundo teñida por los valores de la tierra; y desde entonces, lo que ha dado forma al mundo son países, naciones y fronteras que las delimitan, y repúblicas. La tierra busca estabilidad y seguridad material. Le otorgamos un valor supremo al derecho de propiedad. Los gobiernos y estados deben servir y ofrecer servicios; existen Estados que organizan y administran esos servicios, haciendo cumplir las reglas convenidas. Valoramos el tiempo, la eficiencia, la productividad, la industria y los negocios; los logros personales que otorgan mayor estatus. Aceptamos que exista un grupo de elite que acceda a la propiedad, por herencia o por habilidad. La riqueza, la capacidad de explotar y acumular riquezas a nivel país, o personalmente, también son valores de tierra. La educación es una vía para obtener mayor estatus o bien, de prepararnos para la vida laboral. Nuestro país como república es joven, se independizó del reinado español en 1810, y ha vivido desde entonces con los valores que establece el elemento tierra. Sus conflictos principales están guiados por estos valores: la guerra del Pacifico, que estuvo vinculada a la extracción del salitre y a los intereses económicos ingleses, el conflicto mapuche, y la expropiación/apropiamiento indebido de las tierras, todos ejemplos del elemento tierra. Hoy 21 de diciembre a las 15.22 hora chilena, la conjunción Júpiter-Saturno mutó al aire, hizo la conjunción en cero grados de Acuario y con ello una nueva época o un nuevo ciclo comienza. En nuestro país, el cambio coincide justamente con un proceso constituyente. La calidad de la participación y el debate de las ideas en los próximos años serán fundamentales. Puede que esto lo hayas escuchado: en 1980 y 1981 hubo otra conjunción de Júpiter y Saturno en Libra (signo de aire) ¿no es ése entonces el momento de la mutación al aire? Si, también se lo puede considerar así, pero en el año 2000, la conjunción volvió a un signo de tierra (en Tauro) y se produjo una anomalía -que en realidad no lo es-, pues habitualmente se produce cuando está a punto de mutar de un elemento a otro. En 1980 también se elaboró y votó una constitución, la que nos rige, pero claramente no estaban los grandes ideales del aire plasmados en su redacción inicial y menos en su forma de votación. De aquí en adelante, las conjunciones sólo sucederán cada 20 años, en signos de aire, hasta 2199. El Ciclo o Mutación de Aire comprende desde 1980-2020 a 2199. ¿Cuándo fue la última Mutación de Aire? La última vez que se vivió la Mutación y el ciclo de Aire, fue entre 1186 y 1226 a 1405 D.C. Respetando las diferencias dentro del contexto histórico de cada momento, los astrólogos ocupamos ese momento como referencia para intentar comprender cuáles son los posibles alcances de este próximo ciclo de Aire. En Latino América los registros pertenecen a civilizaciones como la Azteca o Inca, civilizaciones con astronomía, arte, artesanía y sistemas gráficos avanzados que dejan huella de su desarrollo. Lo que nos indica que los próximos 200 años pueden coincidir con un florecimiento cultural y desarrollo sofisticado del pensamiento. El elemento de aire no valora la estabilidad ni la propiedad o el logro material como lo hace la tierra, sino que valora el intercambio, la transmisión y el desarrollo de ideas. También, la libertad, la cooperación y la estética. El progreso está más ligado a ideas innovadoras y progresistas que refinan o hacen avanzar el conocimiento humano y mejoran su condición. El último ciclo de Aire se produce dentro de lo que llamamos la baja Edad Media. En ese período disminuyen las guerras en Europa, crece la tasa demográfica, surge la burguesía (y con ello surge una nueva clase social menos estratificada), la propiedad feudal termina como orden social. Aparecen la imprenta, la primera universidad y el conocimiento se va democratizando. Los europeos destacan las iglesias góticas y el reinado de Luis IX (el monarca justo), conocido como impulsor de la edad de oro en Francia. Pero detengámonos aquí… ¿todo será tan dorado y luminoso? Es el único monarca considerado santo por la iglesia católica, pero organizó la séptima y última Cruzada. Aquí hay un tema de ideas y de qué lado se está con las ideas; ¿serán luminosas las Cruzadas? A la luz de la actualidad parece un proyecto muy poco santo. La Inquisición también se creó en este periodo. Entonces, a pesar del desarrollo del arte, la estética y gobernantes más conmiserativos, hay un lado oscuro relacionado con la intolerancia. “Si no piensas como yo” … entonces… puede llegar a decretarse una barbarie. Contrastan con lo anterior, un Tomás de Aquino y el desarrollo de una filosofía que une la fe y la razón. Las invasiones de los mongoles arrasan en Oriente en el comienzo de este periodo. Ocurrieron matanzas por miles a poblaciones islámicas; pero dentro de tanta brutalidad, individuos extraordinarios que son parte de la población persa, como Yalal ad-din Rumi, huyen junto a su familia hacia el Oeste, a refugiarse en zonas como Anatolia. Comienza un ciclo de oro en el misticismo del Islam. El desarrollo de la ciencia, la poesía, la música, el arte. Místicos Sufis y escolásticos, en medio del éxodo, van dando forma a una de las culturas más ricas en arte y ciencia, donde hay trazas hasta el día de hoy de los valores más refinados del Islam. De un horror vemos que se desprende un legado para la humanidad. Paradojas. Con este botón sesgado y parcial, vemos varios puntos altos y bajos de la historia de la humanidad, pero así también nos podemos hacer una idea de los valores que pueden desarrollarse en ciclos de Aire, que traen un progreso en el pensamiento, pero no siempre a través de la paz y el amor. Hoy la Gran Conjunción coincide con una biblioteca pública enorme, podemos aprender casi lo que queramos si hay acceso y capacidad. Esa biblioteca es el internet. Interactuamos y trabajamos o estudiamos, sin estar físicamente en el lugar: no hay fronteras para conectar con personas que hablan otro idioma o viven alejados. Bits de información que viajan por carreteras invisibles, llenas de datos: propio del elemento aire. La pandemia nos obliga a acudir a la tecnología e interactuar por esta vía: no hay vuelta atrás. El mundo científico, la neurociencia, la biotecnología, la información y el conocimiento irán ocupando un lugar cada vez más importante. En años previos al 2020 -entre 2011 y 2019- aún bajo el influjo de la cuadratura Urano-Plutón, observamos que buena parte de la organización de los movimientos sociales ocurrieron a través del uso de las redes sociales. Los jóvenes, más adaptados y capaces de absorber este conocimiento, se hicieron partícipes de esta nueva manera de comunicarse, organizarse, movilizarse y desestabilizar el viejo orden. Pero tal como internet es una biblioteca pública, la tecnología también ha almacenado datos de los individuos: la posibilidad de control, suplantación y alteración de información que son parte de un tema oscuro del desarrollo de internet. La ética y su desarrollo serán parte de los desafíos a venir. La ética, la justicia, la libertad y la igualdad son parte también de los temas de Aire. Escuchando a una astróloga norteamericana (en una conferencia virtual de OPA), Lee Lehman, mi corazón saltó cuando dijo que el aire no trae estabilidad. El futuro será un mundo en permanente cambio; y poder vivir en él dependerá de nuestra capacidad de adaptación. ¡Eureka! Me parece que eso será el corazón de este periodo. La mente es muy rápida, ágil y las ideas se propagan. Tanto como el corona-virus por la vía aérea. ¿Cuánto podremos procesar y cuánta estabilidad echaremos de menos?... son temas importantes a nivel individual. Lehman agregó otra cosa que me hizo sentido. Aquellos que hemos nacido antes de los años 70s, vivimos la tensión entre dos mundos, entre dos sistemas de valores. Nuestros padres y nuestro sistema de crianza pertenecen a la visión de la tierra y nosotros, habiendo nacido en un ciclo de tierra, hemos debido ir adaptándonos a los cambios que vienen de las tres primeras conjunciones en Libra, entre 1980 y 1981. La adaptación será, por supuesto, muchísimo más exigente de ahora en adelante. Los más jóvenes están adaptados a una realidad cambiante: es su mundo, es el aire que respiran día a día. ¿La Mutación al Aire de la conjunción Júpiter-Saturno es lo que comienza la Era de Acuario?
Es difícil establecer el cuándo. Si consideramos como punto de referencia la precesión de los equinoccios, entonces eso aún no ocurre. La precesión, no es una conjunción de planetas, es un movimiento terrestre más extenso, que ubicará el Punto Aries (que da inicio al equinoccio de marzo) en alineación con la constelación de Acuario (o del Aguador), debido al desplazamiento gradual y muy, muy lento del eje terrestre. Y como dije anteriormente, eso aún no ocurre. Pero si hablamos de la Era de Acuario como la incorporación de nuevos valores y una nueva etapa en la humanidad, entonces, mi respuesta es tal vez. Tal como la Mutación de la Tierra al Aire es un proceso, también puede serlo el paso de la Era de Piscis a la Era de Acuario. Mi impresión es que estamos en el umbral, es una transición. El aire y el viento de la Mutación van abriendo las dos hojas de esa ventana llamada la Era de Acuario, permitiendo ubicarnos debajo del umbral. Ese viento de la Mutación irá dándonos varios adelantos de lo que podría ser -a futuro- entrar derechamente a la Era de Acuario. Una cuestión importante que no hay que olvidar es que la conjunción se da en un momento en que la cuadratura Marte-Plutón y Saturno-Plutón, están aún activas. Y que tanto Júpiter como Saturno, estarán en cuadratura con Urano en Tauro el 2021. La inestabilidad probablemente sea parte del próximo año 2021. Altos y bajos, y muchos cambios. El mismo Corona Virus comenzó a mutar, muy en sincronía con la Gran Conjunción en 0° de Acuario. En adelante, necesitaremos apertura de mente, ya que las respuestas a nuestros dilemas vendrán de un lugar que está fuera de la lógica habitual, y de una concepción más grupal. El aire está conectado a grandes ideales; entre ellos, el sentido de hermandad e igualdad: varios de nuestros problemas se podrán resolver sólo en forma cooperativa. La presencia de los demás se irá haciendo cada vez más clara, es de esperar que eso también signifique desarrollar el interés por la situación de los demás.
0 Comentarios
Tu comentario se publicará después de su aprobación.
Deja una respuesta. |
Details
Alice Thomas
Psicóloga Clínica, Astróloga Categorías
Todo
|